miércoles, 14 de noviembre de 2018

A PROPÓSITO DE LAS ELECCIONES: LA RIQUEZA ¿O LA POBREZA? EN ANDALUCÍA






En clase de Economía de 4º de ESO, hemos realizado un pequeño trabajo de investigación sobre la riqueza ¿o pobreza? de Andalucía. Hace diez años que comenzó la última crisis económica y parece que se está saliendo de la misma. Según los datos en algún sitio, pero no en nuestra tierra. 
En Geografía de 3º y en Economía de 4º se estudia el concepto de "Estado de (o del) bienestar". El libro de texto lo define así:  


“… muchos Estados, con el dinero de los impuestos:
  • Ponen a disposición de los ciudadanos unos servicios públicos, como la sanidad o la educación gratuitas para todos.
  • Otorgan subvenciones y subsidios para atender las necesidades de la población.
  • Establecen un sistema de pensiones que permite vivir dignamente a la población jubilada o a la que no ha tenido ocasión de trabajar.
Es lo que llamamos Estado del bienestar o Estado social. En la actualidad, solo existe en los países desarrollados y es más fuerte en Europa que en otros continentes…”
(GEOGRAFÍA, SERIE DESCUBRE. EDITORIAL SANTILLANA. 2016)

Pero, ¿de verdad existe en España un “Estado del bienestar"?
Los datos son clarificadores: el informe AROPE(At Risk Of Poverty and Exclusion)  demuestra la realidad de nuestra tierra

REDACCIÓN DEL DOCUMENTO: EAPN ESPAÑA -REDES TERRITORIALES CONTRA LA POBREZA Y EXCLUSIÓN SOCIAL-
MÁS: ACCEM, CÁRITAS ESPAÑOLA, COCEDER, COCEMFE, COMISIÓN ESPAÑOLA DE AYUDA AL REFUGIADO, CRUZ ROJA ESPAÑOLA, FEDERACIÓN DE MUJERES PROGRESISTAS, FEDERACIÓN DEPAIN, FUNDACIÓN ESPLAI, FUNDACIÓN SECRETARIADO GITANO, MPDL,ONCE, PLENA INCLUSIÓN, RAIS FUNDACIÓN, UNAD.
El índice AROPE (At-Risk-Of Poverty and Exclusion) incorpora un concepto multidimensional de la pobreza al estar formado por tres subindicadores:
1. Tasa de riesgo de pobreza después de transferencias sociales: Personas cuyos ingresos por unidad de consumo son inferiores al 60% de la renta mediana disponible equivalente (después de transferencias sociales). Los ingresos corresponden al año anterior al de la encuesta.
2. Carencia material severa (CMS): Proporción de la población que vive en hogares que carecen al menos de cuatro conceptos de los nueve siguientes:
1) No puede permitirse ir de vacaciones al menos una semana al año.
2) No puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días.
3) No puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada.
4) No tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos (de 650 euros).
5) Ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad...) o en compras a plazos en los últimos 12 meses.
6) No puede permitirse disponer de un automóvil.
7) No puede permitirse disponer de teléfono.
8) No puede permitirse disponer de un televisor.
9) No puede permitirse disponer de una lavadora.
3. Personas que viven en hogares con muy baja intensidad de trabajo: Personas de 0 a 59 años que viven en hogares en los que sus miembros en edad de trabajar lo hicieron menos del 20% de su potencial total de trabajo. Por ejemplo, en un hogar con dos adultos en el que solo trabaja un adulto a jornada completa, la intensidad de trabajo sería del 50%; si trabajan los dos a jornada completa la intensidad sería del 100%; si uno de los adultos trabaja a media jornada y el otro a jornada completa, la intensidad de trabajo sería del 75%.
















La mayor tasa AROPE entre las mujeres, el nivel de paro en este sector de población, la brecha salarial, el menor acceso a los recursos y bienes del hogar, la inactividad y la interrupción forzosa de carreras académicas o profesionales, las responsabilidades domésticas, los desequilibrios en el sistema de pensiones y la discriminación laboral -por ejemplo en cuanto a salarios y con el llamado “techo de cristal”- entre otras muchas, no pueden tratarse como cuestiones aisladas, sino como piezas de una probada desigualdad estructural. 

Lo anterior son los textos y las imágenes expuestas a partir del material investigado en el IES RAFAEL DE LA HOZ de Córdoba, e incluido en el informe AROPE.
Las elecciones van a coincidir, casi, con la celebración del cuadragésimo aniversario de la Constitución de 1978. Allí en la parte dogmática, se recogen los derechos y deberes de la ciudadanía española:

Artículo 35
1. Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo.
Artículo 40
1. Los poderes públicos promoverán las condiciones favorables para el progreso social y económico y para una distribución de la renta regional y personal más equitativa, en el marco de una política de estabilidad económica. De manera especial realizarán una política orientada al pleno empleo.
Artículo 41
Los poderes públicos mantendrán un régimen público de Seguridad Social para todos los ciudadanos, que garantice la asistencia y prestaciones sociales suficientes ante situaciones de necesidad, especialmente en caso de desempleo. La asistencia y prestaciones complementarias serán libres.
Artículo 47
Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación. La comunidad participará en las plusvalías que genere la acción urbanística de los entes públicos.
En la siguiente entrada se incluirá la carta que van a redactar a Reyes Magos, Papá Noel o a los políticos. A los dos primeros es porque si no responden, pues nada. A los últimos, desgraciadamente, sabemos cómo son. Simplemente, la Constitución lleva cuarenta años, sin y con Unión Europea, con miles de millones que han llegado a nuestra comunidad, y muchos se han despilfarrado...
A continuación veremos cuánto dinero hemos dedicado los españoles -o, mejor, los gobiernos de turno-, en salvar a los bancos y a cajas de ahorro, y, si es posible, saber quién los dirigía -en su mayoría políticos de los grupos dominantes-.
Nada, seguiremos con las promesas... incumplidas. Al menos para los y las que no tienen carné del partido correspondiente...